Si te has preguntado cómo elegir tu talla de copa menstrual o cómo saber cuál es, enhorabuena, estás dando el paso a una menstruación más consciente y sostenible. En el post de hoy vamos a intentar resolver todas tus dudas para que aciertes con la talla de enna cycle. Hay varios factores que influyen en la elección de una talla u otra: la edad, si se han tenido partos o no, si practicas deporte, cuál y con qué frecuencia, la altura y la complexión. Sin embargo, algo que no afecta es la cantidad de flujo, así que no creas que por tener un flujo abundante, tu talla debe ser mayor. La talla de enna cycle depende de la amplitud de la cavidad vaginal y la fuerza del suelo pélvico, la cantidad de flujo sólo determina la frecuencia con la que debes cambiarte la copa menstrual.
Factores que influyen en la elección del tamaño de la copa
Aunque las compresas y los tampones también van por tamaño, no debes guiarte por aquellos métodos que usabas anteriormente ya que estos sí se rigen por la cantidad de flujo, independientemente de la cavidad vaginal.
- Edad: El suelo pélvico y sus músculos cambian en función de la edad, es por ello que en chicas jóvenes necesitarán tallas más pequeñas y que a medida que pasen los años se necesiten tallas más grandes.
- Deporte. Hay prácticas deportivas como el running, el tenis, atletismo o baloncesto entre otros que debilitan el suelo pélvico, por tanto; tus músculos del suelo pélvico no tendrán tanta fuerza y es posible que necesites una talla mayor. Por contra, otros deportes como el yoga o pilates, lo refuerzan y por tanto, la probabilidad de que la talla adecuada sea una S, es mayor.
- Partos vaginales. Tener partos vaginales debilita el suelo pélvico (también las cesáreas no programadas en que se ha hecho un primer esfuerzo por expulsar el bebé). Después del parto, lo habitual es utilizar una talla L, no obstante si has hecho ejercicios de recuperación del suelo pélvico y/o prácticas yoga o pilates, podrías usar una M o incluso una S.
- Complexión y altura: A priori, si eres alta y/o de complexión grande necesitarás una talla mayor, si eres bajita y/o de complexión pequeña necesitarás una talla menor.
Como hay muchas variables en juego, en enna cycle tenemos la calculadora de tallas que te ayuda a identificar qué talla de copa menstrual necesitas.
¿Qué pasa si mi puntuación está entre dos tallas?
La calculadora de tallas te hace unas preguntas para combinar todas las variables y ofrecerte un resultado numérico que irá del 0 al 4, para la talla S; del 4 al 8, para la M y del 8 al 12 para la talla L. Si tu puntuación es un 4 o un 8, deberás tener en cuenta el estado de tu suelo pélvico y de los factores anteriormente mencionados para elegir la talla de copa menstrual adecuada.
No obstante, recuerda que en enna cycle disponemos de garantía de talla para que en casos como éste puedas adquirir una copa menstrual sin el miedo a equivocarte.
¿Después del parto necesitaré otra medida de copa menstrual?
Como te hemos contado, lo habitual después de un parto, es la talla L, pero si vienes de una talla S, quizá sólo necesites una M. Has de tener en cuenta en especial si has hecho recuperación del suelo pélvico así que, aunque no es lo habitual, quizá incluso puedas volver a usar la misma talla. Lo que es importante es que no uses la copa en los sangrados postparto ya que la vagina y las paredes están resentidas y doloridas y no es adecuado para tu recuperación. Así que una vez que tus hormonas se estabilicen, no tienes que pensar en qué talla de copa necesitarás sino en disfrutar de tu bebé. Una vez te vuelva el período (tardará más si das el pecho), prueba tu anterior copa para decidir si finalmente necesitas una talla más.